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lunes, 31 de octubre de 2016

6 razones porque nos estancamos al adelgazar


“Estoy estancado con mi peso", "no sé qué más hacer para seguir bajando peso", es muy común escuchar estas declaraciones, vamos a comentar varios errores que afectan nuestro proceso de adelgazar.

Creemos que estamos haciendo las cosas bien porque hemos perdido cierto número de kilos y pensamos que debemos seguir el mismo camino, pero entramos en pánico cuando vemos que a pesar de perder peso, esos lugares donde hay grasa acumulada se ven prácticamente iguales.
Debemos entender que en la pérdida de peso,  la grasa no se quema de manera lineal de forma que cada semana se va perdiendo un kilo.
La bajada de peso se suele producir "a saltos" y por eso de un día para otro se puede perder más de un kilo  o se puede estar varios días sin perder un gramo, el cuerpo es una maquina perfecta que se adapta a las condiciones a las que es sometido y si el organismo detecta la restricción calórica, responderá ralentizando el metabolismo con el único fin de ahorrar calorías.
Generalmente los primeros kilos desaparecen muy fácil, ya que con la alimentación adecuada y la actividad física, se eliminara liquido retenido, y se realiza un proceso de limpieza o desintoxicación del colon, eliminaremos materia fecal acumulada (podemos acumular entre 2 y 8 kilos de materia fecal), luego el proceso se estabilizara y notaremos cierta continuidad en el avance, pero al estar cerca de la meta el proceso se hará mas difícil ya que la mayor parte del exceso desapareció.
Cuando tratamos de hacer una análisis sobre los motivos, siempre estamos buscando en factores externos (que los puede haber, por eso es importante la visita al médico) y nos cuesta ser autocríticos sobre los motivos por lo cual no estancamos en X peso o Y medidas.

Algunos motivos del porque nos estancamos al adelgazar

1.- El autoengaño.
Justificarse por no adelgazar con el padecimiento de alguna enfermedad como el hipotiroidismo, que aunque es cierto que afecta drásticamente, también es cierto que puede revertirse, solo es cuestión de ir al médico y el no ayudara a normalizar nuestros niveles de hormonas para que podamos seguir adelante.
2.- No desayunar o hacerlo muy tarde.
Sáltate el desayuno, no comas en la primera hora después de levantarte y el fracaso está asegurado.”
3.- No comer lo suficiente.
Asociamos adelgazar con dejar de comer o restringir drásticamente la cantidad que comemos, y eso es un error ya que al comer menos de lo que debemos, estaremos quitándole al cuerpo calorías que necesita para funcionar y como medida de protección el organismo se ralentizará, gastando menos calorías de las que debería.
4.- Pesarte en un mal momento.
El mundo de las mujeres es más complejo que el del hombre, y la báscula no entiende eso. No hagas caso de la báscula durante los 10 días antes de la menstruación, se retienen mucho más líquido antes de tener la menstruación, así que no le hagas caso a la báscula, pesarte en un mal momento puedes hacer que te desanimes por simples variaciones de líquidos a corto plazo. Así que ya lo sabes, antes de pesarte ten en cuenta tu ciclo menstrual.
5.- No dormir el tiempo adecuado.
Dormir el tiempo adecuado es muy importante, múltiples estudios confirman la relación entre aumentar de peso y no dormir el tiempo suficiente ya que afecta de manera significativa los niveles de varias hormonas que están directamente relacionadas con aumentar de peso.
6.- No perder peso a pesar de realizar mucho ejercicio físico.
Esto es más común de lo que creemos, debemos recordar siempre que lo que nos hará perder peso será el déficit calórico que generemos, así que si a pesar de hacer ejercicio y mantener el plan de alimentación no se están viendo los resultados estamos consumiendo igual a o mayor cantidad de calorías de las que gastamos.
Si la alimentación esta en los parámetros correctos el problema está en la actividad física y acá el error se da porque se realiza únicamente actividad cardiovascular y no entrenamos con fuerza o no subimos la intensidad de la actividad cardiovascular.
Lo anterior lo podemos entender de esta manera, si comenzamos a correr 45 minutos a 10km/h y nuestro cuerpo quema 450Kcal, quizá, cuando llevemos un mes entrenando a diario, nuestro cuerpo se habrá vuelto más resistente y eficiente y no quemará esas 450Kcal sino que serán muchas menos, es momento de aumentar el ritmo y tiempo de la actividad, luego hablaremos de los beneficios de los ejercicios con cargas o peso.
Estos son algunos de los motivos por lo cual nos estancamos en el proceso, hay muchos más pero por ahora si atacamos estos que son los más comunes seguramente veremos nuestras balanzas moverse nuevamente hacia la tan anhelada meta.


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